EL DINERO Y LA FAMILIA
En la crisis que nos toca vivir a causa del COVID-19 quiero reflexionar sobre dos aspectos fundamentales de nuestra existencia, mismos que son: el dinero y la familia.
EL DINERO.- Todos o la gran mayoría de quienes somos parte de la humanidad, conocemos y sabemos por experiencia que el dinero es uno de los bienes indispensables para nuestra supervivencia, pues; con el dinero podemos comprar terrenos, casas, ropa alimentos, etc; si no tenemos el bendito dinero, nuestras necesidades y deseos, no pueden satisfacerse, creando una desilusión y profundo malestar en nuestro ser.
Pero para tener dinero, debemos producirlo; trabajando sea en forma física o intelectual, no podemos decir que el empresario que dirige una o varias empresas, no trabaja; su trabajo es el doble o triple o multiplicado cuantas veces; como igual es su retribución económica. Todo esto en condiciones normales es perfectamente válido y hasta plausible; pero cuando se dan crisis como las que estamos viviendo en la actualidad, por el CORONAVIRUS, observamos que todo se derrumba: se paralizan las industrias, se cierran las fábricas, algunas empresas comerciales trabajan a medias, etc; esto repercute en despido de empleados; se prioriza el aislamiento social para combatir a este silencioso enemigo, mismo que desde lo invisible; causa más daño que las mejores y más sofisticadas armas de guerra, en definitiva; el dinero ya no puede ser producido y empieza a escasear; sin solución momentánea, con la simple esperanza de que cuando todo esto pase, volvamos a comenzar.
LA FAMILIA.- a excepción de quienes son solitarios en este mundo, que son inmensa minoría, todos tenemos esposa, hijos, padres, hermanos; quienes en cualquier circunstancia están ahí para compartir con nosotros, para apoyarnos, para incentivarnos y en tiempos de crisis; para hacernos compañía. Por esta y otras razones, sin temor a equivocarme diría que: nuestra salud y la de los nuestros, es el capital más valioso que poseemos con el que en algún momento nos levantaremos de esta dura caída y cuantas veces nos caigamos, podremos levantarnos, puesto que el bienestar de nuestra familia es el objetivo primordial por el que diariamente luchamos.
Bajo estas circunstancias, quiero sumarme a los miles y miles de voces, que piden colaboremos con el aislamiento social, que cada uno desde nuestros hogares, nos convirtamos en un soldado combatiente en contra de este virus mortal.Ciertamente, muchos tenemos necesidades que satisfacer, pero si es tan necesario salir, tomemos todas las precauciones, usando los equipos de protección, recordemos que con un poco de irresponsabilidad, no solamente ponemos en riesgo nuestra salud, sino la de nuestros seres queridos y la de la sociedad en general.
Que la mente de nuestras autoridades, sea lúcida para tomar las mejores decisiones sin descuidar la parte económica, ya que igual dará morirse de covid 19 o de hambre, si el resultado será el mismo, me atrevería a pensar que el toque de queda debería darse de 18 a 06 horas y que debería darse un poco de libertad al transporte de bienes y servicios, pues; si pido me traigan la merienda, no pueden por cuanto no se pueden movilizar, entonces cómo se mueve la economía?
Por favor quédese en casa, disfrute de momentos que por el trabajo, nunca los vivió, aprovéchelos ahora.
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